El mayor descubrimiento del s. XIX no estuvo en el ámbito de las ciencias físicas, sino en el poder del subconsciente tocado por la fe. Cualquier individuo puede adentrarse en un eterno manantial de poder, que le permitirá superar cualquier problema que se encuentre en su camino. Todas las debilidades pueden superarse: salud corporal, independencia económica, despertar espiritual, prosperidad más allá de nuestros más aberrantes sueños. Esta es la superestructura de la felicidad.
W. James (1842-1910)
3 comentarios:
Una entrada muy placentera y nutriente, además de real.
Ha sido un placer leerla.
Ayer alguien muy querido me decía, lo más importante; "Tener la mente limpia"
Un abrazo
Este James no será cienciólogo??
gracias antonio por disfrutar de la entrada pragmática.
rosa, este tipo fue el hermano de Henry James! :)
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