Mr. P

Mr. P.

Intento comprenderte. Créeme. Intento entender por qué coño haces lo que haces. Nunca entendí por qué los marineros sin escoba intentan asesinar a los albatros. Pero esta vez haré caso a eso de “a palabras necias, oídos sordos” y voy a querer pensar que los insultos definen mejor a quien los proclama que a quien los recibe. Supongo que me da igual. Me da igual que sepas quién soy. Hay secretos que no entenderás nunca, aunque ella te los cuente, y creo firmemente que a las personas se les conoce realmente cuando adivinas lo que esconden. Me da igual que sepas qué clase de gente soy, aunque ni yo mismo lo sepa. Supongo que los demás siempre saben de ti, o creen saber de ti, más que tú mismo.

Intento comprenderte. Créeme. Tienes razón. Es muy fácil escribir. Lo difícil es lanzarte a los tiburones y que sea lo que sea. Y que me coman si es lo que tiene que pasar. Lo difícil es apostar a caballo perdedor. Lo difícil es lo valiente. Prefiero arriesgarme y perder que quedarme de brazos cruzados. Prefiero que me corten los pies, si es lo que preguntas.

Publicado por Luis